martes, 25 de septiembre de 2007

Vacaciones 2007

Hey, hey, hey. Pues sí, ha sido una larga ausencia de los escenarios blogísticos, pero aquí estoy otra vez, esta vez para hacer un mini-recorrido de las vacaciones de este año, que aunque cortas, intensas.

Nuestros pasos se dirigieron inicialmente a la región de Algarve, allá en el sur portugués. Alojados en Porto Dona Maria Hotel & Resort (jo, tio, superguay), muy cerquita de la localidad de Luz y de Lagos.
De la zona, destacar la población de Lagos, animadísima y con cantidad de lugares para comer de forma muy económica, la zona de la Ponta da Piedade, con cuevas y formaciones rocosas el mar que pueden ser visitadas mediante paseos en barcas ofrecidos como reclamo turístico; un poco mas allá, el espectáculo del cabo de San Vicente, el extremo oeste de la Europa Continental; localidades como Portimao, Albufeira, y el banquete de Arroz con marisco en el restaurante O Palheiro de Vila do Obispo. Un paseo agradable y con muy buen comer.

Nada más llegar del Algarve, avión para la isla de Tenerife, la más grande del archipiélago canario, a pasar una semanita de relax. La verdad es que al final nos hemos quedados cortos en dias para ver la isla, pero bueno, a nuestro ritmo, hemos visto lo que queríamos. Destacar los parajes naturales no tan conocidos (por lo menos para mí) como son los de Masca y Montes de Anaga, el primero un pelín tocado por el reciente incendio acaecido, pero aún así, guardando una gran belleza. Eso sí, hay que agarrarse para coger las carreteras de acceso ;) (bueno, no tanto). No me podía imaginar que podía haber tantísimo verde en esta Isla, siempre favorecida por los famosos vientos Aliseos.

Los Gigantes

Ni qué decir tienen que el espectáculo estrella es el Parque Nacional de las Cañadas del Teide con su increible cima de 3718 metros, y que curiosamente, conseguí ver por primera vez al tercer dia de vacaciones y desde la isla de La Gomera. Impresionante el atardecer desde los Roques de García, a los pies del Teide y muy próximos al Parador Nacional, y el manto de estrellas que recubre el cielo de este Parque, uno de los más limpios que jamás he visto. El Parque, muy interesante, desde la corona de árboles que lo rodea, hasta el paisaje lunar que deja ver continuamente las lenguas de lava que antaño recorrieron estas laderas.

Atardecer en el P.N. del Teide

En la Gomera, pues como no, visita al Parque de Garajonay, y la curiosidad de conocer el silbo gomero, un medio de comunicación de los lugareños que les permtía y en algunos casos aún permite comunicarse a través de silbidos salvando grandes distancias en lugares, en muchos casos, bastante escarpados y de difícil acceso.

Esto que os he contado son unos pocos de los muchísimos atractivos - los acantilados de Los Gigantes, Garachico, Icod de los Vinos, La Orotava, etc - que se pueden encontrar por estos lares sin, por supuesto olvidar, la calidez del trato que siempre nos dieron (un recuerdo especial para mis camareras favoritas del Hotel Semiramis).
Así que hala, a todo el le guste disfrutar de playa, montaña y buen comer, que se de una vuelta por ahí.

Un saludo!